miércoles, mayo 23, 2007

hábitos extraños

mientras ella se despeina bajo el agua
te servís un trago junto al balcón
una hermosa noche para el amor

entre la niebla asoma su reflejo
el mismo cuerpo veinte años más
clavando la mirada entre los hielos
te hundís en el silencio otra vez

podrías mirarme de vez en cuando

el juego empieza, va quitando el frío
tras una oscuridad de ojos abiertos
sus labios tiemblan al sentir el beso
como una fina nieve de placer

podrías mirarme de vez en cuando
podrías hablarme, gritarme, tocarme, matarme
...

caminan por la arena, van sin dirección
junto al río eligen un lugar para el amor

sentados en el centro de un enorme salón
hablaron de sus días, hablaron de más
y ahora descansan sus miradas a través del ventanal
él piensa en abrazarla, ella en los hijos bajo el sol
...

un vaso cae junto a la cama
un testigo mudo, un sueño feliz
una noche más entre los dos
una noche más entre los dos